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Parque Nacional Chirripó cuenta con el cerro más alto de todo el país, con 1.820 msnm.

Actualmente, Costa Rica cuenta con 27 Parques Nacionales administrados por el Sistema Nacional de Área de Conservación del Ministerio de Ambiente y Energía (SINAC). Motivo para celebrar en grande, el 24 de agosto, el Día Internacional de estas áreas protegidas. ¿Has visitado alguno de ellos? El territorio protegido de Costa Rica abarca aproximadamente: el 26% de la superficie terrestre y el 45% de las aguas territoriales del país, según datos oficiales otorgados por el SINAC en entrevista con Revista Viajes.

Estos porcentajes reflejan que los costarricenses somos privilegiados con esta riquezanatural, que conquista a los turistas nacionales y del exterior. ¡Atrévete a sacar el tiempo para disfrutarlos!

De acuerdo con la nueva Regionalización del Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE), la región de Costa Rica que cuenta con mayor número de Parques Naciones es la Central, con un total de seis: Parque Nacional Volcán Irazú, Parque Nacional Volcán Poás, Parque Nacional Braulio Carrillo, Parque Nacional Tapantí-Macizo de la Muerte, Parque Nacional La Cangreja y Parque Nacional Volcán Turrialba.


Parque Nacional Volcán Poás

Esto responde a que se ubican muy cerca del Valle Central, cuentan con facilidades turísticas, rutas de acceso en buenas condiciones, poseen gran variedad de especies de flora y fauna, variedad de paisajes, gran cantidad de atractivos naturales y culturales; y la vista de los cráteres, para aquellos parques nacionales que tienen volcanes.

Según el SINAC, todos los Parques Nacionales cuentan con oportunidades de desarrollo y/o crecimiento natural, así como la conservación de ecosistemas propios de cada zona de vida; así mismo, cada uno de ellos ha tenido una recuperación paisajística y ecosistémica de acuerdo con sus condicionesambientales. A modo general, todos presentan en algún momento diferentes tipos de amenazas, como por ejemplo: cacería, incendios forestales, desarrollo de proyectos agropecuarios y urbanísticos, cambio climático, pesca ilegal, contaminación de acuíferos, entre otros.

Los Parques Nacionales costarricenses con menor visitación son: Parque Internacional La Amistad, Parque Nacional Marino Las Baulas, Parque Nacional Piedras Blancas, Parque Nacional Barbilla, Parque Nacional Juan Castro Blanco y Parque Nacional Guanacaste. Lo anterior, se puede decir que se debe a las condiciones propias del área silvestre protegida; es decir, son creadas para conservación y protección de los recursos naturales, por lo que tienen algún tipo de especies o ecosistemas susceptibles a la presencia del ser humano, por lo que no se permite el acceso en algunos sectores; otros factores pueden ser la falta de facilidades turísticas para el visitante, difícil acceso, falta de infraestructura, entre otros.


Mono en el Parque Nacional Manuel Antonio

Proyectos de mejora

Según el SINAC, con el Proyecto Fortalecimiento del Programa de Turismo Sostenible en Áreas Silvestres Protegidas (BID-Turismo), se intervinieron con mejores en los últimos meses los siguientes Parques Nacionales: Manuel Antonio, Volcán Irazú, Volcán Poás, Cahuita, Tortuguero, Volcán Arenal,Rincón de la Vieja, Corcovado y el Refugio Nacional de Vida SilvestreMixto Caño Negro. Actualmente, se está desarrollando el Proyecto para el Mejoramiento de los Parques Nacionales del Pacífico Sur (Proyecto JUDESUR); y se van a intervenir los Parques Nacionales: Corcovado, Internacional La Amistad, Marino Ballena y Piedras Blancas.

En cuanto al Proyecto BID-Turismo el monto fue de aproximadamente $12.000 millones. El Proyecto JUDESUR tiene una inversión de aproximadamente ₡1.722 millones.


Parque Nacional Manuel Antonio es el de mayor visitación en Costa Rica. Foto cortesía ICT.

Luego de consultar al SINAC los retos y desafíos que presentan estas áreas protegidas, enumeraron: el principal reto es la resiliencia al cambio climático, tanto en materia biológica como social. La instauración de una gestión ecosistémica y participativa, permanencia del valor de las muestras genéticas de la flora y fauna, la coexistencia del turismo sostenible y la conservación. Además de la incidencia en el pensamiento social a través de la educación ambiental, dotación de personal e inversión en infraestructura.


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