Karen Retana Barboza / Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
El bosque te da la bienvenida a lo lejos, lo que para muchos es inimaginable explorar, en Místico Park es una realidad. Varios tramos de puentes colgantes que en conjunto forman un sendero de 3 kilómetros muestran el camino hacia las profundidades del bosque tropical donde cientos de especies conviven en completa armonía.
Su hogar es una reserva privada de 650 hectáreas ubicada en La Fortuna de San Carlos, Zona Norte de Costa Rica. Su propietaria, la familia Castillo Rodr[iguez tuvo la visión de desarrollar un santuario
natural con las condiciones para que personas de cualquier edad pudieran experimentar de cerca la magia que encierra este destino desde sus cimientos hasta el dosel.
A través de un tour de senderismo, cientos de visitantes han podido vivir una experiencia enriquecedora no solo en términos de naturaleza sino también por las propiedades mismas de bienestar físico
y mental, explicó Priscilla Mora Castillo, quien recientemente asumió la gerencia general del parque en medio de una nueva etapa de muchos desafíos que ha venido de la mano del tema de la pandemia.
Fue en el año 2000 cuando este proyecto dio sus primeros pasos, cambiando de forma radical la actividad económica a la que la familia se dedicaba y que consistía en la ganadería de leche y queso artesanal. Siempre manteniendo la filosofía de cuidar la reserva, emprendieron el reto de crear un sendero que cruza alrededor de la finca por los diversos cañones, dando así la oportunidad de disfrutar de un bosque con especies autóctonas,
Hasta el dosel
Místico Park se ubica a 600 metros sobre el nivel del mar, a una altura intermedia entre los bosques de altura y la Bajura Sancarleña, logrando una visitación de vida silvestre muy variada, al encontrarse en el único corredor biológico que conecta la reserva con el Parque Nacional Volcán Arenal, la Reserva de Monteverde, la Reserva de Santa Elena, la Reserva del Bosque tenue de los Niños y el Parque Nacional de San Ramón con las Llanuras del Norte y con la Cuenca de Tilarán que conecta con el Volcán Tenorio. El sendero es cementado sin gradas, sus ascensos y descenso son “suavizados” por lo que es apto para cualquier edad. Al ser un santuario natural en perfecto equilibrio, los guías explican cómo se relaciona una planta siendo hospedera de especies de vida silvestre como ranas, anfibios e insectos. “Es el ejemplo perfecto del diseño divino en cuanto a belleza, equilibrio y sabiduría”, sostuvo Mora.
Para los amantes de la observación de aves, Místico posee un catálogo de más de 450 especies de aves, identificadas por los guías locales, conteos y la aplicación eBird. “Somos el segundo lugar en la zona con más posibilidades de observación. Nosotros tenemos visitación de especies de la bajura así como de altura. Casi la mitad de las especies que se pueden ver en Costa Rica”, explicó Mora. El parque está incursionando en el turismo de bienestar que se ofrecen a través de las llamadas “terapias de bosque”, una nueva tendencia impulsada por las nuevas experiencias que busca el viajero de conectarse con el mundo natural y aprovechar los beneficios físicos que pueden brindar los bosques como es la oxigenación. Tadeo Morales, Director General de Místico recibió la acreditación como guía de terapia de bosque porparte de la Asociación de Guías de Naturaleza de los Estados Unidos. Esta apuesta se suma a una nueva etapa en la administración del parque bajo el liderazgo Priscilla Mora. Con el
lema “Recuperación 360º, una labor de todos”, establecieron una serie de objetivos que contempla la recuperación en lo económico y un refrescamiento de la empresa, replanteando la cultura organizacional, impulsando sus valores empresariales como son: la Sinergia, la Empatía, y la Coherencia.
“Empleados felices, clientes felices, no podemos ofrecer una experiencia de bienestar integral si no la hay a lo interno. Apostamos por nuestro recurso humano no solo por sus capacidades, sino también en sus habilidades blandas de trabajo en equipo de vivir en coherencia con sus esquemas de valores”, sostuvo Mora.