Uno de cada tres destinos de viaje en el mundo está ahora completamente cerrado a los viajeros internacionales, reveló los más recientes datos de la Organización Mundial del Turismo (OMT).
De acuerdo con la agencia, la aparición de nuevas variantes del coronavirus ha llevado a muchos gobiernos a revertir los esfuerzos para aliviar las restricciones a los viajes.
A ello se suma que las nuevas olas pandémicas en los principales mercados emisores de viajeros hacia Centroamérica ha traído mayor incertidumbre a la industria turística que depende en buena medida de esta actividad.
En Panamá, la plaza hotelera abierta alcanza un 38%, con pérdidas significativas, ante la falta de un plan de acción para reactivar la industria turística. Esto ha impactado en el empleo ya que solo se ha logrado reactivar el 15% de los contratos suspendidos en pandemia.
Mientras tanto el futuro es incierto para los empresarios hoteleros quienes suman deudas con la banca por más de $600 millones, aseguró Armando Rodríguez, presidente de la Asociación Panameña de Hoteles.
En Guatemala, los esfuerzos apuntan también a estimular el turismo interno y regional, por la cercanía a El Salvador, Honduras, sur de México y Estados Unidos.
El Inguat estableció como proyección base para este año la llegada de 198. 079 visitantes e ingresos por $129,7 millones, una meta ambiciosa en un escenario Covid-19 que apunta a ser tan adverso o más que en 2020.
Para las autoridades de turismo de El Salvador, la reactivación de radica en el cumplimiento de las medidas de bioseguridad y en la promoción de la vacunación. Así lo dijo la Ministra Morena Valdez, al decir que "el sector turístico fue el primero en cerrar y el último en abrir, ellos están conscientes de que si no se cuidan no van a poder reiniciar sus actividades".
Valdez dio a conocer que solo entre enero y junio, el país recibió $800 millones de parte del rubro turístico.
En el caso de Costa Rica, datos del sector turismo indican que debido a la pandemia del Covid-19 durante el 2020 se registraron pérdidas de $3 mil millones, con una afectación directa a 100 mil familias.
Actualmente los hoteles con más de 100 habitaciones pueden operar con un 75% de su capacidad y desde el pasado 1 de agosto, se admite el ingreso sin seguro de viaje a turistas menores de 18 años y a los mayores de edad con el esquema de vacunación COVID completo. Lo anterior, más los cuatro días feriados que se trasladaron a lunes, buscan dar un respiro a esta industria.