La competencia por dominar el transporte de turistas centroamericanos, ya no solo se disputa en los cielos, pues ahora las líneas de buses miran como una amenaza la estrategia de bajo costo impulsada por algunas compañías aéreas que aterrizaron en el mercado local.
Con precios desde $120 en un viaje redondo a Guatemala o Panamá, tanto Volaris como Wingo, aerolíneas de bajo costo, iniciaron sus operaciones el 1° de diciembre, plantando la cara a Tica Bus, Nica Bus y Expreso Panamá que realizan el mismo recorrido por tierra.
Viajar a Guatemala representa unos 90 minutos por vía aérea, mientras que por tierra significa 32 horas, más de 1.100 kilómetros lo que conlleva la logística de transitar por diversas fronteras del istmo.
En cuanto a las aerolíneas, Volaris ofrece vuelos diarios con horarios en la mañana y en la tarde, con opción de llevar dos equipajes de mano pequeños.
Los adicionales como maletas facturadas, comidas y entretenimiento a bordo se adquirirán por diferentes precios, desde $44 hasta $74 con opción de cambiar asientos, adelantar o atrasar el viaje, entre otros.
La idea es competir con los precios de los servicios de los buses intrarregionales, puesto que los vuelos se harán a precios similares pero en mucho menos tiempo.
“Queremos evitar que los centroamericanos utilicen rutas por tierra de más de 30 horas de viaje, nuestra competencia no son otras aerolíneas, pero sí las compañías de buses”, dijo Enrique Beltranena, CEO de Volaris.
En tanto, Wingo viaja a Panamá los días lunes, jueves, viernes, sábados y domingos, mientras que a Ciudad de Guatemala vuela los lunes, jueves y sábados.
Los precios rondan los $105 a Guatemala y $116 a Ciudad de Panamá.
El precio incluye impuestos, agua y el derecho a llevar una pieza personal de mano de hasta seis kilos, además de un equipaje de hasta diez kilos, mientras que el adicional de hasta 23 kilos tiene un valor de $25.
“En el modelo de servicio de Wingo, el pasajero personaliza su experiencia desde la compra hasta que se encuentra a bordo, de acuerdo con sus necesidades, gustos y presupuesto”, dijo Catalina Bretón, directora de Wingo.
Sin embargo, no todo supone ventajas a la hora de viajar en avión, ya que también existen costos adicionales y restricciones aplicadas como en el peso de las maletas y los cargos por cantidad de equipaje.
“Como consumidor final es importante valorar que cada uno de los servicios adicionales tiene un costo significativo en estas alternativas de viaje, como por ejemplo: la elección de asientos, cantidad y peso de equipaje permitido, cambio de fecha en boletos los cuales son castigados por sumas inclusive mucho más altas que el valor del boleto”, sostuvo Carlos Medina, gerente de Mercadeo de Tica Bus.
En esta empresa están informando sobre los costos adicionales que debe pagar el pasajero si su decisión de viaje es por vía aérea.
Para el consumidor, apostar por la vía terrestre también supone disponibilidad de horarios para viajar, con lo cual no es necesario comprar tiquetes con mucha anticipación ni llegar a la terminal horas antes para asegurar el traslado.
Las estaciones se encuentran en zonas céntricas con fácil acceso para los pasajeros, ofreciendo un beneficio económico en el proceso de traslado.
Por ejemplo, en Tica Bus tienen más de tres años de no incrementar sus tarifas en ninguna temporada del año.
Los representantes de líneas de autobuses también reconocen que han realizado inversiones importantes para asegurar la comodidad de sus pasajeros, dotando a las unidades de facilidades como acceso a Internet, servicio de comidas y bebidas, televisión, baños, y mayor ergonomía en sus asientos provistos de reposapiés.
En Transnica, sus voceros aseguraron que la empresa continúa su proceso de mejora que implica inversiones en nuevos autobuses, en la modernización de sus terminales y tecnología aplicada al servicio al cliente.
Esta empresa está de acuerdo con la promoción de la competencia pero garantizando un mercado justo.
Fuente: Central America Link