Latinoamérica Sin Presos Políticos demanda que en ningún país de la región se utilice el encarcelamiento como una forma de control y castigo a la libertad de expresión, organización y manifestación.
Se invita al público a visitar los murales y a reflexionar, empatizar y abogar por los derechos humanos de las presas y expresas políticas de la región.
En conmemoración al Día Internacional de la Mujer, Latinoamérica sin Presos Políticos devela dos murales artísticos en honor a seis presas y ex-presas políticas de Cuba, Nicaragua y Venezuela.
A pesar de que 222 presos políticos en Nicaragua fueron liberados y pudieron reencontrarse con sus familias, en América Latina persisten más de 1.400 personas presas políticas en países cuyos sistemas legales y judiciales penalizan a las voces disidentes.
Ante este panorama, Latinoamérica sin Presos Políticos lanza esta nueva iniciativa en las ciudades de San José, Costa Rica y Bogotá, Colombia simultáneamente. El objetivo del movimiento, conformado por miembros de la sociedad civil en la región, es visibilizar a mujeres que fueron privadas de su libertad por su labor activista o de oposición política. Sus historias y la de sus familiares son retratadas a través del arte mural e invitan al público a conocerlas, para reflexionar, empatizar y abogar por sus nombres.
Estas muestras artísticas fueron elaboradas por muralistas originarias y reconocidas de cada país. En el caso de San José, se trata de Valeria Romero Sánchez, quien plasmó en su obra a tres mujeres víctimas de sus contextos nacionales.
La primera de ellas es Samantha Jirón, la columnista más joven en la sección de opinión para el Diario La Prensa de Nicaragua y formó parte del elenco del programa de opinión y análisis político “Politicando”. En noviembre del año 2021, en la coyuntura de las elecciones presidenciales, fue secuestrada por paramilitares de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, acusada por conspirar en contra de la soberanía nacional, traición a la patria y propagación de noticias falsas. Fue condenada a 8 años de cárcel y la pérdida perpetua de su nacionalidad. El 9 de febrero fue excarcelada y desterrada de Nicaragua junto a 221 personas presas políticos.
La segunda mujer retratada es Emirlendris Benítez. Fue detenida el 5 de agosto del 2018 en Venezuela, por presuntamente estar involucrada en hechos conocidos como Caso del Dron (presunto Magnicidio contra Nicolas Maduro). Luego de haber salido a acompañar a su pareja Yolmer Escalona (también imputado) a hacer un traslado en su taxi fueron detenidos por la policía. Estuvo desaparecida y terriblemente torturada al punto de haber perdido a su bebé producto de las golpizas y actualmente tiene severas dificultades para caminar, no obstante, no se le permite atención médica. Su familia la reconoce solidaria, noble y tiene la convicción de que todo se puede hacer con fe.
Por último, la tercera integrante del mural en San José es Mailene Noguera Santiesteban, de 36 años, residente de Batabanó, en la provincia de Mayabeque. Es madre de dos hijos y está detenida desde el pasado 17 de julio de 2021 por manifestarse pacíficamente en las calles de Cuba. Fue condenada a 4 años y 6 meses de prisión por falsos cargos de desórdenes públicos, desacato y ultraje a los símbolos de la patria. Es integrante del Movimiento de Opositores por una Nueva República, denunció en una carta torturas físicas y psicológicas contra detenidas en la Prisión de Mujeres de Occidente, conocida como "El Guatao", donde se encuentra recluida.
Latinoamérica Sin Presos Políticos, demanda que ningún país de la región acuda al encarcelamiento como una forma de control y castigo a la libertad de expresión y manifestación. La experiencia de cada persona presa política es única, sin embargo, todas están unidas en su lucha por la verdad y la justicia. Este movimiento honra sus historias y hace un llamado al público mediante el arte, para exigir conjuntamente la liberación de todos los presos políticos en América Latina.