Según La Tribune los primeros aviones que se retirarán de los aires están bajo el régimen de alquiler, y en noviembre del año pasado se decidió no renovar el contrato.
De los 10 Airbus A380 que tiene Air France, tres serán devueltos entre este año y el que viene, y los otros serán renovados hasta ser retirados en 2024.
Los A380 que volarán hasta el 2024 tendrán una jubilación dorada, porque sus cabinas serán renovadas para dotarlas de detalles de más categoría.
Es la misma estrategia que ha hecho Qantas, que antes de invertir en comprar ocho A380 a Airbus prefirió actualizar las comodidades de sus diversas clases.
Air France empezó a volar con los A380 en 2009, y el último de sus diez aviones se incorporó en el 2014. En todos estos años las cabinas apenas han tenido retoques superficiales.
Razones para jubilar a los A380
Entre las razones que decidieron el fin del A380 en Air France se encuentran los elevados costes de poner un avión tan grande en el aire.
Los A380 de Air France tienen una capacidad de 516 pasajeros, y además del elevado gasto de combustible para sus cuatro motores, necesita pistas largas y otros requerimientos que no todos los aeropuertos pueden cumplir.
Actualmente este gigante de los cielos se usa en los vuelos que parten desde París-Charles de Gaulle hacia Nueva York-JFK, Johannesburgo, Los Ángeles, Shanghái, Abiyán (Costa del Marfil), Hong Kong y Miami.
Fallos periódicos
Según fuentes de Air France citadas por La Tribune, los A380 suelen tener fallos que cada tanto obligan a la aerolínea a enviarlos al taller de reparaciones. “Cada semana hay uno que se queda en tierra”, indican.
Para reemplazar a los A380 el grupo franco-holandés está analizando sumar al B787 Dreamlinear o al A330-900. El A350-1000 también atrae las miradas de los directivos, pero los 325 millones de euros que cuesta cada unidad enfría el entusiasmo.